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Vértigo y pérdida auditiva ¿Mis audífonos para sordos realmente me ayudarán?


La pérdida auditiva se ha vuelto la principal consulta hacia los profesionales de la audición. No obstante, cada vez con mayor frecuencia algunos usuarios que nos visitan, también solicitan orientación hacia consultas para Otorrinolaringología por problemas en su equilibrio. Estos usuarios manifiestan sensaciones de movimientos extraños de su entorno o de ellos mismos. Dicha sensación se denomina Vértigo, el cual consiste en la sensación ilusoria de movimiento externo o interno.


Existen diferentes tipos de vértigo, los cuales se pueden reconocer y diferenciar en relación a su lugar de origen.


TIPOS DE VÉRTIGOS

El vértigo de origen central es el de menor frecuencia. Éste suele presentar signos y síntomas neurológicos en conjunto con la sensación de movimiento. El vértigo de origen periférico se relaciona directamente con el oído interno, zona que además de transformar las vibraciones sonoras en impulso eléctricos en la cóclea, también posee otra zona que envía información eléctrica relacionada al equilibrio. Estas estructuras corresponden a los canales semicirculares, el utrículo y el sáculo, los cuales componen el Labertinto del Oído Interno. Los problemas de vértigo en el oído interno, pueden estar presentes en conjunto con la hipoacusia o pérdida de audición.


EL VÉRTIGO SUELE SER COMÚN EN ADULTOS MAYORES

Dentro del Vértigo de origen periférico (en el oído interno), encontramos el Vértigo Posicional Paroxístico Beningno, muy común en adultos mayores, cuya prevalencia aumenta sobre los 60 años. En este tipo de vértigo, la sensación de movimiento y pérdida del equilibrio se presenta al realizar movimientos bruscos de la cabeza, como es el pasar de estar acostado a sentarse o viceversa, también se puede presentar al inclinarse para atar los zapatos, entre otros movimientos posicionales.


¿POR QUÉ COBRA IMPORTANCIA EL AUDÍFONO PARA SORDERA EN EL DESEQUILIBRIO?

Como mencionamos anteriormente, el vértigo de origen periférico suele presentarse junto a una pérdida auditiva. Esta relación ha sido estudiada por diversos grupos profesionales, quienes postulan que en algunos usuarios el audífonos para sordos encendido disminuiría la frecuencia con la que los adultos mayores presentaban síntomas de desequilibrio.

Un usuario de audífonos para sordos debe focalizar su aprendizaje post entrega de audífonos en la utilidad y funcionalidad de sus aparatos, ya que además de ayudar en las pérdidas auditivas y nuestra comunicación como bien se menciona en nuestra columna “La audición y la comunicación: un elemento fundamental para nuestra salud”, en ocasiones, el audífono para sordos puede ser de gran apoyo para aminorar la sensación de pérdida de equilibrio o perspectiva de movimientos de nuestro entorno.

Diana Velásquez

Interna de Fonoaudiología

Universidad Andrés Bello de Viña del Mar

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